Con una elevada población de estudiantes y maestros, Huejutla refleja el ritmo de la educación; corre con las clases y deambula lentamente con las vacaciones. De esta forma, la educación desborda los estrechos límites de las aulas para alcanzar la sociedad de la región.
Entonces… ¿por qué no emprender una campaña que muestre a Huejutla como la “Ciudad de la Educación”? Con ciudadanos educados, dirigentes honestos y calles limpias.
En la "Ciudad de la educación" las "clases" se imparten desde la casa, la escuela y la sociedad, en un compromiso de todos y para todos. Con contenidos educativos que generen significado y añadan hábitos saludables. Porque , ¿de qué sirve aprobar las asignaturas si éstas no tienen relación con el entorno o no se acompañan de hábitos saludables.
El maestro Gregorio Salguero te invita a pertenecer al grupo de maestros comprometidos con esta causa y te invita a escribir en esta página, recuerda... ¡la educación implica un cambio de conducta!.